La secadora


Debido a que es uno de los mayores consumidores de electricidad, se recomienda limitar su uso a situaciones de emergencia o cuando el clima impida el aprovechamiento de la radiación solar.

El funcionamiento eficiente

Asumiendo un gran consumo en calentamiento del aire, las mejoras en materia de eficiencia se producen en el modo de eliminar la humedad o de reutilizar el calor remanente y, sobre todo, en el control electrónico de todo el proceso.

El secado puede ser por:

Extracción. El aire calentado y húmedo se expulsa al exterior para eliminar la humedad y seguir secando. (modo ineficiente).

Condensación. El aire caliente y húmedo de secado se hace circular por un circuito de condensación que elimina el agua. (modo eficiente).

El control puede ser por:

Sensor de humedad. Sistema inteligente que detiene el proceso a la humedad deseada por el usuario (modo eficiente).

Temporizador. El proceso se detiene cuando transcurre el tiempo previsto de programación (modo ineficiente).

Datos útiles

Tras un centrifugado a 1.000 rpm queda un remanente de humedad del 60%. Es decir, si la carga del lavarropas es de 6 kg de ropa de algodón, al final del lavado la ropa contiene unos 3,5 litros de agua que hay que eliminar por el proceso de secado. Por eso es tan importante centrifugar la ropa al máximo posible para destinar menos energía al secado. Finalmente, es importante no sobresecar la ropa. Si dispone de él, utilice el programa “punto de planchado” para no secar las prendas completamente.